Borrar
La patrullera de la Guardia Civil 'Río Navia' trasladó el cuerpo de Noel Iglesias a tierra.
El cadáver del mariscador desaparecido el miércoles aparece a la altura del cabo Peñas

El cadáver del mariscador desaparecido el miércoles aparece a la altura del cabo Peñas

Una draga localizó el cuerpo de Noel Iglesias, que fue trasladado a Avilés por la patrullera de la Guardia Civil

FERNANDO DEL BUSTO

Sábado, 1 de noviembre 2014, 00:14

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El cadáver de Noel Iglesias González, el mariscador de Pravia que desapareció el pasado miércoles mientras faenaba en la zona de la isla de La Deva, apareció ayer sobre las 13 horas a la altura del cabo Peñas . El cuerpo fue localizado por la draga 'Sub', que trabajaba a unas cuatro millas al oeste de Cabo Peñas y que alertó al Centro Regional de Coordinación de Salvamento Marítimo en Gijón. Inmediatamente, Salvamento Marítimo informó al Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), que suspendía la búsqueda a la espera de confirmar que se trataba del pescador, algo que apuntaban todos los indicios.

Nada más conocerse la localización del cuerpo, acudía a la zona una embarcación de Salvamento Marítimo para custodiar los restos mortales mientras esperaba la llegada de la patrullera 'Río Navia', de la Guardia Civil. La embarcación del instituto armado recogía el cuerpo y lo trasladaba al puerto de Avilés. Sobre las 14.20 horas atracaba en la Estación de Prácticos de la Autoridad Portuaria.

Apenas un cuarto de hora después, llegaban los familiares y amigos de Noel Iglesias, comenzando por su esposa, Ana Romero. Los agentes de la Guardia Civil del Mar les explicaron que el estado del cadáver permitía su identificación mediante las huellas dactilares, por lo que no era necesario la identificación personal. La descripción de alguno de sus tatuajes también facilitaba la tarea.

Eran cerca de las tres de la tarde y se desconocía a qué hora llegaría el forense y el juez para ordenar el levantamiento del cadáver, por lo que tanto familiares como amigos optaban por ir a descansar, siendo acompañados a un restaurante próximo por personal de la Autoridad Portuaria de Avilés. También contaron con el respaldo de expertos de Cruz Roja de la Mar, que, además de apoyo psicológico, les informaron de los trámites legales que deberían realizar.

Poco después de las 15.10 horas, llegaba uno de los forenses avilesinos y efectivos de la Guardia Civil desembarcaban el cadáver para proceder a su identificación. Además de las huellas dactilares, alguno de los tatuajes descritos por los familiares confirmaba la identidad de Noel Iglesias González poco antes de las 15.40 horas.

Posteriormente, el cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico-Forense, en La Corredoria, donde hoy sábado está previsto que se realice la autopsia. La intención de la familia es que el funeral se oficie en Pravia, a cuyo tanatorio será trasladado en cuanto sea posible.

Amplio dispositivo

De esta manera se daba por cerrada una amplia operación de búsqueda que se inició en la tarde-noche del miércoles, cuando la familia de Noel Iglesias González alertaba de que no había llegado después de que hubiese salido a marisquear por la mañana. Desde el primer momento, los esfuerzos se concentraron en la zona de punta Cotolla, donde se localizó la mochila en la que llevaba sus útiles para marisquear, aunque las embarcaciones también rastrearon hasta punta Vidrias, en las inmediaciones del observatorio de aves de Bayas.

Ayer viernes, con unas mejores condiciones de la mar que el jueves, los efectivos de Bomberos de Asturias volvieron a explorar la media docena de cuevas situadas en los acantilados próximos a punta Cotolla. El testimonio de otros perceberos les llevaron a detenerse también en los acantilados de punta Vidrias, donde aseguraban haberlo visto durante la mañana del pasado miércoles. En las que serían sus últimas horas, el dispositivo terrestre esperaba el inicio de la bajamar para poder acceder a una cueva situada en la playa de El Reguero, una cala situada entre Bayas y Muniellos, de difícil acceso.

En sus acantilados existe una cueva con zonas que se mantienen secas en la pleamar y, por ello, existía una última esperanza de encontrar con vida a Noel Iglesias. Además de Salvamento Marítimo, con sus barcos y helicóptero, la Guardia Civil del Mar y el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas, el SEPA coordinó un dispositivo terrestre con la participación de Bomberos de Asturias de los parques de Avilés y Pravia, Policía Local de Castrillón, Cruz Roja, y su helicóptero.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios