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Concentración de delegados sindicales en la calle de acceso a la sede regional del PP, en Oviedo.
Industria enviará a Competencia la próxima semana la nueva orden de ayudas al carbón

Industria enviará a Competencia la próxima semana la nueva orden de ayudas al carbón

Nadal se compromete a mediar entre mineras y eléctricas, pero advierte de que no puede forzar la compra de mineral

DIANA DE MIGUEL

Sábado, 23 de mayo 2015, 00:42

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Reunión a reunión, el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, lleva meses dibujando el futuro mapa de la minería española y asturiana con, de momento, muy pocas esperanzas para el sector. La próxima semana, el Ministerio de Industria remitirá a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) una propuesta de orden de ayudas al carbón que, a juicio de los sindicatos, no garantiza la continuidad del sector porque, cuando entre en marcha, advierten desde el SOMA-Fitag-UGT y la Federación de Industria de CC OO, «puede que ya no haya minería del carbón».

A las puertas ya de la decisiva jornada electoral del domingo, la minería exige respuestas inmediatas para que se vuelva a quemar carbón ante la nueva oleada de EREs que han puesto en marcha las compañías mineras y que ha vuelto a poner al sector en pie de guerra. Según USO, en apenas un mes, hasta 4.000 empleos podrían derivar en expedientes de regulación temporales o incluso de extinción. De ahí que, tras un jueves de intensas movilizaciones en las cuencas mineras de toda España, la jornada de ayer volviera a ser un ir y venir de encuentros, con mucha palabrería, algún que otro compromiso y nuevas concentraciones de protesta que, en el caso de Asturias, se trasladaron a las inmediaciones de la sede regional del PP, en Oviedo. Su acceso fue protegido por un amplio despliegue policial que casi superó en efectivos a los propios manifestantes.

La concentración, en la que ni se escucharon petardos ni se corearon consignas contra el Gobierno, se prolongó durante algo más de media hora. Se produjo minutos después de que Alberto Nadal adelantara en Madrid cuáles serán los próximos movimientos del Ejecutivo de Rajoy en relación con la propuesta de orden de ayudas al carbón que tantos quebraderos de cabeza está acarreando en el sector. Una propuesta que no cubre las expectativas de ninguna de las tres partes interesadas -sindicatos, empresas y eléctricas-, según reconoció Nadal, pese a haber sido mejorada en los últimos días y que la próxima semana será remitida a la CNMC para, posteriormente, enviarla a las autoridades europeas.

Nadal quiso dejar claro que el objetivo es «crear un marco que sea favorable al carbón autóctono y que le aporte futuro». Se comprometió, incluso, a mediar entre mineras y eléctricas, pero remarcando que no se puede establecer ningún mecanismo que «obligue a las empresas a comprar carbón», ya que es contrario a la normativa comunitaria. «Estamos dispuestos a ayudar de forma importante a las empresas eléctricas a que realicen esas inversiones medioambientales con subvenciones muy altas, que cubran el 90% de éstas, siempre y cuando compren desde ya carbón nacional», puntualizó. Remarcó que la propuesta no puede incluir la exención del 'céntimo verde', una de las peticiones tanto de los sindicatos como de las empresas para asegurar la viabilidad del sector, ya que «es contraria frontalmente tanto a la legislación comunitaria, como a los principios básicos en los que estamos de comercio internacional».

Pese a todo, avanzó que podrían encontrar argumentos de carácter medioambiental que permitan decir «que determinado carbón tenga una fiscalidad inferior». «Si afecta al carbón nacional estaríamos encantados de analizarlo y ver si es posible», añadió.

Como contrapartida, el secretario de Estado de Energía, quien también recibió ayer a una delegación de mineros que se concentró, a instancia del sindicato USO, frente a la sede del Ministerio, exigió al sector un «esfuerzo» para que defina con claridad cuáles son sus objetivos de futuro. «Me gustaría ver planes de viabilidad más claros. Algunas empresas los han presentado, pero otros se limitan a pedirnos un esfuerzo», concluyó.

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