Oliu: «España es el país de Europa al que menos le afecta la crisis de China»

España está en plena recuperación económica, la crisis ya es historia y el desplome de los mercados de China no debe ser motivo de preocupación para nuestro país. Mensajes positivos fueron los que ayer se escucharon entre los expertos financieros que se dieron cita en el Hotel de la Reconquista de Oviedo, con motivo de la reunión del jurado del Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2015.

El presidente del Banco Sabadell, Josép Oliu i Creus, subrayó que la economía en España está «creciendo sólidamente», aunque admitió que el «cambio de perspectiva sobre la economía china» ha provocado un «reajuste mundial». Un escenario que, para Oliu, no debe entenderse como una amenaza para España, sino todo lo contrario, ya que la caída del precio de las materias primas «afecta positivamente» a un país como el nuestro, altamente dependiente de la producción extranjera. «España es el país de Europa al que menos le afecta la crisis de China», aseguró. «No hay por qué preocuparse, todo lo contrario, existen buenas perspectivas de crecimiento tanto para este año como para el próximo», concluyó. La crisis, entiende, es ya agua pasada.

En la misma línea se manifestó el presidente de La Caixa. Isidro Fainé Casas, también jurado en el premio Princesa de Asturias, advirtió de que todos los indicadores confirman una sólida recuperación económica. «No lo decimos nosotros, lo dicen los indicadores de consumo, del tráfico de la autopista, del turismo, las exportaciones, la balanza comercial... Todo indica que estamos en una fase de recuperación económica», celebró.

Fainé dijo ser consciente, no obstante, de que siguen existiendo problemas importantes que deben solventarse para que toda la población perciba en su economía doméstica esta mejoría. «El desempleo prolongado es fuente de desmotivación y de destrucción de las personas, eso aún lo tenemos que arreglar», asumió. Igual que el presidente del Sabadell, Fainé no estima que la caída del mercado asiático pueda implicar una parálisis en la recuperación económica de España. «Hoy en día todo lo que pasa en el mundo nos afecta, y más lo que ocurre en China, que es la segunda economía mundial, pero no debe verse como un problema. Quizá en lugar de crecer un 7, lo hagamos un 5», respondió.

De hecho, pese a que la industria siderúrgica europea está resultando especialmente afectada por la caída del precio del metal asiático, Gonzalo Urquijo Fernández, presidente de ArcelorMittal España y miembro también del jurado, habló ayer en Oviedo de «optimismo» tras preguntarle por la inversión de 150 millones de euros pendiente para la construcción de las baterías de cok en la planta gijonesa de la multinacional.