UGT y CC OO de Asturias pactan no dar de baja a sus delegados aunque la empresa cierre

UGT y CC OO han suscrito un pacto con el que pretenden mantener los índices de representatividad que ambas formaciones tienen en la actualidad en el Principado y que les dotan de una cómoda mayoría sindical. El acuerdo, firmado el pasado 23 de octubre por Abel Suárez González y Emilia Escudero Robles, secretarios de organización de UGT y CC OO en Asturias respectivamente, incluye entre otras cuestiones el compromiso de ambas formaciones de no dar de baja a sus correspondientes delegados sindicales en la Oficina Pública de Registro aunque hayan finalizado sus mandatos como consecuencia, por ejemplo, del cierre de las empresas en las que trabajaban, o porque no dispongan de suplentes en este centro de trabajo que puedan ocupar este cargo de representación sindical. Ambas organizaciones entienden que la finalización «anticipada» de los mandatos de sus delegados en estos supuestos -«u otras causas de la misma índole», añade el documento- supondría una pérdida del número de delegados que «distorsionaría los índices de representatividad, modificándolos en función de factores ajenos a la voluntad de los trabajadores libremente expresada en las urnas». Para evitar que esto ocurra, ninguno de estos sindicatos formalizará la baja de sus delegados en estos casos «al menos hasta la finalización del período de cómputo» e, incluso, se comprometen a no iniciar el proceso para cesar a delegados o miembros de comités de empresa del otro sindicato mayoritario con el que llegan a este acuerdo.

Fuentes jurídicas consultadas por este periódico consideran que el pacto es una «barbaridad» y que cualquiera que lo impugne podría recibir el apoyo de los tribunales. Estas mismas fuentes argumentan que en el caso de que cierre la empresa, la actividad del delegado no tendría sentido ya que no habría a quién representar y añaden que, si el sindicalista cesara en la empresa por otras cuestiones, por ejemplo al verse afectado por un ERE, la ley exige que sea sustituido por el siguiente de la lista. De hecho, existen sentencias del Juzgado de lo Social de Logroño que avalan este planteamiento y en cuyos fallos el magistrado advierte de que esta práctica «aleja de la realidad» los datos de la Oficina Pública de Registro e «influye en la determinación en cada momento de cuáles son los sindicatos más representativos». No debe pasarse por alto que con el pacto entre UGT y CC OO se impide que quede mermada su representatividad, en función de la que las organizaciones sindicales reciben subvenciones y tienen presencia en instituciones públicas.

Este periódico trató ayer sin éxito de hablar sobre este acuerdo con UGT y, desde CC OO, se indicó que no se harían declaraciones al respecto hasta el próximo lunes, cuando está previsto que ambas formaciones mantengan una reunión.

Aunque es uno de los puntos más conflictivos del citado documento, éste incluye otros cinco apartados por los que las centrales se comprometen a «evitar filtraciones interesadas de datos» a los medios de comunicación para no fomentar «guerras de cifras» entre organizaciones que, en su opinión, no hacen más que estimular «factores indeseables en la normal competencia entre ambos sindicatos». Del mismo modo, acuerdan «no impugnar ante la jurisdicción social los laudos arbitrales siempre y cuando la reclamación electoral haya sido promovida por cualquiera de las dos organizaciones», y convienen no promover elecciones sindicales en nuevas empresas donde CC OO y UGT no tengan representación. El documento concluye con una «recomendación final» que deja abierta la puerta a nuevos acuerdos entre ambas organizaciones en relación con estas materias.